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CHARLA SOBRE EL URBANISMO DE NUESTRA CIUDAD EN EL POLÍGONO DE PUMARÍN

Al final de un debate en el que participaron el concejal de urbanismo, el presidente de la Federación de Vecinos urbana y algún otro especialista, nuestro responsable no tuvo tiempo a responder a algunas preguntas. (No te pierdas lo último de la noticia) LA NUEVA ESPAÑA (26/4/06)


(Desde nuestro colectivo proponemos que los centros municipales tarden un poco más en cerrar. Tome nota la alcaldesa,…)



Morales defiende el metrotrén de Cascos ante el presidente de la FAV LA NUEVA ESPAÑA (26/4/06)


El concejal de Urbanismo, en un debate en el Polígono, apuesta por el ferrocarril frente al uso del automóvil

J. M. CEINOS El socialista Jesús Morales Miravalles, concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Gijón, salió ayer en defensa del proyecto del metrotrén (presentado por Francisco Álvarez-Cascos), ante las críticas vertidas contra la penetración ferroviaria en la ciudad por el arquitecto Vicente Díaz Faixat y Amador García, presidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos (FAV).

Las críticas de los dos últimos y la defensa del edil de Urbanismo tuvieron como escenario el centro municipal del Polígono de Pumarín, en el transcurso de un debate titulado «¿Qué modelo de ciudad queremos?», dentro del programa de los VIII Encuentros «Les otres cares del planeta».

Inició las críticas el arquitecto Díaz Faixat, al argumentar que no entendía la utilidad de construir un metro en Gijón, dado el tamaño de la ciudad. Le siguió en las críticas el presidente de la FAV, quien afirmó que era un proyecto «del saber político que no entiende el saber popular».

Rápidamente salió al quite Jesús Morales, para argumentar que el metrotrén es un elemento dentro de la política «de todo lo que se pueda hacer para evitar el uso del vehículo privado». Recordó el concejal de Urbanismo que el primer proyecto presentado por Francisco Álvarez-Cascos «llegaba hasta la zona de El Molinón», y que fueron los socialistas quienes pidieron al entonces titular de Fomento que el túnel se alargara hasta las proximidades del campus. Luego, con la victoria en la urnas de José Luis Rodríguez Zapatero, el Ayuntamiento pactó con el Ministerio de Fomento de la socialista Magdalena Álvarez que los trenes de cercanías lleguen hasta la zona del Hospital de Cabueñes.

E insistió Morales en defender la idea ferroviaria de Francisco Álvarez-Cascos al contradecir a Díaz Faixat con respecto a su idea de que el proyecto es dotar de un metro a Gijón: «Hay que verlo como un transporte interurbano, no como un metro. Se trata de potenciar el uso del ferrocarril entre Gijón y Oviedo (y viceversa); batallar para que mucha gente que va en coche a Oviedo use el tren». En definitiva, afirmó Morales Miravalles, «potenciar el uso del ferrocarril en el área central de Asturias».

Respecto al modelo de urbanismo en la ciudad de Gijón, Morales Miravalles distinguió entre el punto de vista económica y el social. Respecto al primero, señaló que el equipo de gobierno de Paz Fernández Felgueroso (y los anteriores, todos en manos del PSOE desde 1979), «viene trabajando para que Gijón conserve su esencia industrial, que ha sido esencial en nuestra economía, pero sin olvidar el sector terciario en todos sus ámbitos».

Y con respecto al punto de vista social, el edil de Urbanismo afirmó que la política municipal va encaminada a crear «una ciudad integrada», donde los vecinos tengan los mismos servicios vivan en la zona que vivan.

Por su parte, Amador García destacó las políticas de integración de los barrios y opinó que hay que ver Gijón «de una manera integral», criticando veladamente, a renglón seguido, las políticas de proyectos muy concretos, sin citar ninguno.

El arquitecto Vicente Díaz Faixat definió Gijón como «una ciudad que no es bonita, pero no conozco otra donde se viva mejor que aquí», para afirmar que una ciudad «tiene que ser la mezcla de muchas cosas, teniendo en cuenta lo anterior», es decir, la herencia recibida.

En otro momento del debate se pusieron de manifiesto críticas a la concepción de los nuevos barrios como «polígonos» y, en concreto, el diseño urbanístico de Montevil, con grandes espacios abiertos entre los edificios. «El debate entre la edificación abierta o cerrada es viejo», añadió Jesús Morales, quien especificó que en Montevil «se optó por un modelo mixto y habrá que esperar años para saber si da resultado».

Con respecto al tráfico de vehículos, Morales Miravalles aseguró que la política municipal va encaminada a «colocar obstáculos para evitar el uso abusivo del coche», como por ejemplo las llamadas «zonas 30», en las que el límite de velocidad es, precisamente, de 30 kilómetros por hora. Por su parte, Amador García aseguró que desde la FAV, en colaboración con otros colectivos, se reivindicará «una red de carriles bici que vayan unidos a las zonas 30».

El final del debate estuvo protagonizado por varios representantes del colectivo en defensa de la zona rural, quienes asaetaron al edil de Urbanismo con preguntas relacionadas con el nuevo Plan General de Ordenación Urbana, especialmente por la repercusión del valor del suelo en las viviendas, la construcción de 1.200 casas unifamiliares entre el autocine de La Providencia y los campos de golf de El Tragamón y La Lloreda o el motivo por el cual el Ayuntamiento destina en la parte oeste de la ciudad todo el suelo para las viviendas sociales y ni un metro cuadrado en la zona este. Una representante de los rurales dijo que de esta forma en el oeste van los pobres y el este se reserva para los ricos. Morales no pudo contestar por falta de tiempo (cerraban el centro municipal).

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