Siete sentencias se han sumado a las 23 que anulan el plan general de Gijón.
¿Cuánto nos costarán a los gijoneses todos estos recursos al supremo que ha iniciado el ayuntamiento? ¿Cuánta cara, cuánta soberbia y cuánto despotismo hace falta para que nadie sea responsable de tanta ilegalidad y tanto atropello?
El Ayuntamiento acumula ya treinta sentencias que anulan el anterior plan
EL COMERCIO-12-12-2009
Se inicia formalmente el proceso de revisión del PGO, pero el Ayuntamiento sigue recurriendo en paralelo ante el Tribunal Supremo tantas sentencias anulatorias contra el anterior PGOU como le van llegando. Ayer fueron ratificadas en el Pleno diez nuevas resoluciones de la Alcaldía en relación con otros tantos fallos judiciales.
Según el último recuento, el plan Teixidor acumula ya 30 sentencias desfavorables por graves defectos procedimentales durante su tramitación. Este número redondo sirvió a la portavoz municipal del PP, Pilar Fernández Pardo, para criticar que el equipo de gobierno «lleva 30 fracasos acumulados». En ese sentido, Pardo consideró «una ambigüedad» que el equipo de gobierno siga gastando en abogados para defender la tramitación del plan general anterior mientras se emprende la redacción de uno nuevo.
El concejal popular Pablo Fernández también hizo alusión durante su intervención las sentencias anulatorias, pero para criticar en su caso al concejal José Manuel Sariego por sus declaraciones inculpatorias contra los vecinos de la zona rural en un reciente acto socialista. Sariego aseguró que «la ambición y el afán de lucro desmedido de algunos propietarios de suelo» está detrás de la mayoría de estos fallos judiciales. «Esta no es la fórmula para amigarse y mirar hacia adelante», lamentó Fernández, que recordó que son los jueces y no los vecinos quienes dictan las sentencias. Además, señaló que «si hay alguien en la ciudad con afán desmedido de lucro es quien fuera arquitecto jefe municipal, Ovidio Blanco», imputado por la comisión de tres posibles delitos por sus operaciones de compraventa con una finca de Cabueñes.
Deja un comentario